viernes, 3 de julio de 2020

Una breve poesía para finalizar...

No me intentes replicar,

que el tema que me planteo

no es una cuestión de sexo

más bien se trata de igualdad.

Cuando quieres recordar

a esos grandes caballeros

que descubrieron el mundo entero

de la herstory te voy a hablar.

Si queremos la igualdad

hablemos de empoderamiento

pues debemos recordar

que es necesario, no te miento.

Plantearse la transversalidad

en todo lo que rige nuestro tiempo

políticas de igualdad

no suponen ningún contratiempo.

Si trabajas las 3 R

roles, recursos y representación,

los prejuicios que te generen

dejarán de ser una obsesión.

Y si no me paras sigo,

con el lenguaje inclusivo

con el que debemos educar

a nuestras hijas e hijos.

Y si me permites puntualizar,

esta experiencia completa

no sólo me ha puesto gafas violetas

si no que me ha hecho recapacitar.

Y de nuevo muchas gracias

a Irene, a Adrián y a Fran,

por guiarnos y posibilitar

este curso de fundamentos sobre la igualdad.


viernes, 26 de junio de 2020

Reto Semanal: ¿Qué puedo hacer yo? Igualdad en las AAPP

El reto de esta semana hace que nos miremos a nosotros mismos con gafas violetas y pensemos en lo que hacemos y en lo que nos queda todavía por hacer. ¿qué podemos hacer cada una de las personas, desde nuestra posición como empleadas o empleados públicos, para impulsar la igualdad entre mujeres y hombres?


A voz de pronto, me parece que nuestra actuación y relación con los demás es generalmente igualitaria, pero si nos ponemos a pensar realmente en los pequeños detalles nos damos cuenta de que no es así.


Algo tan simple al parecer como el lenguaje inclusivo no está arraigado en nuestra forma de comunicarnos y muchas veces lo omitimos sin ni siquiera ser conscientes de ello.


Por ejemplo; mi cometido en la Administración Pública tiene que ver con la atención al ciudadano. Sí, por supuesto a los ciudadanos mujeres también les atendemos pero no decimos que atendamos a los ciudadanos y a las ciudadanas. Curioso, ¿no?


También expedimos certificados de residencia a los extranjeros… y a las extranjeras también, ¡cómo no!. Atendemos a los ciudadanos comunitarios, y a las ciudadanas comunitarias también, y trabajamos para la Policía Nacional...


Me ronda una idea, quizá ya rebuscada por mi interés en mirar con mis nuevas gafas violetas, que tiene que ver con el concepto de Policía. Cuando hablamos de Policía, sin especificar, hablamos en masculino. Parece que el concepto queda atribuido a los hombres policías en su versión más arcaica. Para referirnos a ellas, las llamamos “mujeres Policía”; especificamos su género, como si no fuese intrínseco al concepto de la Policía. 


Quiero pensar que este concepto viene dado por los orígenes del cuerpo, completamente masculino, y que ese género es el que ha quedado arraigado en ese término. 


Podríamos poner en debate esta cuestión y plantearnos que, quizá la manera más adecuada para dirigirnos al cuerpo sea nombrar a “los hombres y mujeres Policías”.


No sé si mi reflexión sea exagerada pero el lenguaje inclusivo poco a poco va entrando en nuestras vidas y hace que nos replanteemos muchos de los conceptos más consolidados.


¿Qué pensáis vosotros?¿Os gustaría sentiros servidos y protegidos por los hombres y las mujeres Policía? Yo creo que sí… ;)




Más igualdad y más denuncias, claves de la Policía Nacional para ...


martes, 16 de junio de 2020

LA TRANSVERSALIDAD DE GÉNERO EN LA POLICÍA NACIONAL

El reto de esta semana sobre transversalidad de género aplicado a nuestro entorno laboral me parece realmente interesante.


Actualmente me encuentro trabajando en una comisaría de Policía Nacional y, a pesar de ser uno de los cuerpos en los que la representación femenina es más notable (9.500 mujeres policía, más del 15% de la plantilla) podemos observar que, a medida que se asciende profesionalmente la presencia de mujeres disminuye considerablemente.


Para mí crear transversalidad de género implica crear políticas, medios o situaciones propicias para garantizar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, por lo que es necesario analizar detalladamente todas las situaciones y estudiarlas para poder acceder sin desigualdad.


¿Por qué no ascienden las mujeres? ¿Qué es lo que obstaculiza a las mujeres el desempeño de puestos directivos o de mando?


Cierto es que las dificultades que debe superar una mujer para poder ascender son mucho mayores que las  de un hombre en sus mismas circunstancias, y sus oportunidades, por lo tanto son menores. La presión que se debe soportar cuando se intenta el ascenso jerárquico, unido a la necesidad de demostrar constantemente su capacidad profesional por el hecho de ser mujer,y la incomprensión del resto de la organización, hacen que el ascenso se convierta en una aspiración menos atractiva para las mujeres que para los hombres policía.


No olvidemos que para poder ascender en la carrera policial no basta con preparar y optar a una oposición, sino que se necesita un informe de los mandos, y en este caso en general, los informes de los mandos, incluso en el caso de ser positivos, suelen cuestionar su posible eficacia como mando. Las mujeres policías han de luchar, muchas veces, contra la reticencia de sus propios mandos.


En la sociedad actual, en todos los ámbitos y por lo tanto también en éste, las pocas mujeres que acceden al poder lo tienen que hacer demostrando que son más duras que los hombres; han tenido que socializarse y mimetizarse en una cultura machista, empleando sus mismos métodos, muy lejos de las habilidades propias o deseadas.


La capacidad de trabajar en equipo, de reconocimiento hacia los demás, la empatía… son actitudes que las propias mujeres trasladan tanto en la vida privada como en la profesional. 


A pesar de esto, y de sus innumerables ventajas, el techo de cristal sigue existiendo. Mujeres policías con mayor titulación que sus propios mandos varones se encuentran sin poder optar a un ascenso en su carrera profesional. Son las mismas mujeres, muchas veces, que en vista de tantas dificultades y luchas desisten de sus aspiraciones cansadas de tantos retos, además del sentimiento de culpa que se crea en el momento que se les hace elegir entre la maternidad o la carrera profesional.


Porque es cierto que aparentemente no existe discriminación en el acceso a esos puestos, pero si observamos con detenimiento podemos detectar discriminaciones indirectas, discriminaciones por omisión.Como por ejemplo cuando se decide un sistema de promoción basado únicamente en el tiempo efectivo de trabajo. Este sistema perjudica más a las mujeres debido a que presentan una mayor tasa de absentismo, bajas (maternidad), reducción de jornada, excedencia por cuidados a personas mayores…


Para ascender en la Policía Nacional, además de opositando en cada convocatoria se debe presentar cierta disponibilidad durante el ejercicio, cosa menos frecuente en las mujeres que priorizan otras cosas, como la familia, a pesar de que su gesto se traduzca en el escaso compromiso o interés de liderazgo. 


Por todo ello creo que es necesario aplicar la transversalidad en los procesos selectivos y procurar reducir aspectos que indirectamente afectan a la promoción de la mujer policía.


Para impactar en las 3Rs dentro de la Policía Nacional, es decir, en los Roles, Recursos y Representación de las mujeres y hombres podríamos proponer lo siguiente:


  • Roles: poner en valor aspectos como la capacidad de trabajo en equipo, la empatía, el reconocimiento hacia los demás como valores esenciales para ejercer el liderazgo y el mando; y no sólo la firmeza, la ambición o la dura competencia.

  • Recursos: dotar de medios, formación, flexibilidad a las mujeres en los procesos de promoción y modificar su sistema para hacerlo totalmente justo para ambos sexos.

  • Representación: promocionar la presencia femenina en la representación de la  los altos cargos de la Policía Nacional, hacerlos más visibles y participativos públicamente.

martes, 9 de junio de 2020

COCO CHANEL, ALGO MÁS QUE VESTIR A LA MUJER

¿Cómo afrontar este segundo reto, con la variedad de personajes y hechos históricos que han marcado la herstory que actualmente conocemos?

Es la pregunta que me ha rondado en mi cabeza a lo largo de todo el día y la que me he hecho a la hora de empezar a seleccionar la información que me iba encontrando.

Claro está que existen innumerables hechos de significativa relevancia histórica sucedidos a favor de la igualdad: voto de la mujer, descubrimientos científicos, acceso a estudios universitarios, inclusión en el mundo laboral, en la política, etc... Pero, desde mi punto de vista, quería encontrar un personaje curioso, revelador, incluso cercano a todas nosotras que, en algo tan aparentemente banal como la moda, ha plasmado una reivindicación social feminista sin precedentes. 

Me refiero a Coco Chanel, que a principios del siglo XX revolucionó la vestimenta de la mujer y creó una nueva apariencia llena de simbolismo y desafío hacia los estereotipos establecidos en el momento.

En definitivas cuentas, podemos destacar de su invención y de su espíritu revolucionario los siguientes hechos:

          Mezcló el vestuario masculino con el femenino, incluyendo en el guardarropa de las mujeres prendas hasta entonces tan extravagantes como los panalones, jerseys de punto, blaycers, el calzado plano o los sombreros; prendas atribuidas exclusivamente a los hombres.


Hasta entonces las mujeres vestían embutidas en incómodos corsés; ella liberalizó la silueta y adaptó las cómodas prendas masculinas a las femeninas, utilizando telas de punto, lana,... agradables al tacto y al movimiento natural de las mujeres.
     
Popularizó el corte de pelo a lo garçon, no sólo pensando en la comodidad, sino también en lo socialmente revolucionario que suponía no marcar la diferencia de género en la apariencia.
 
Creó ropa para una mujer trabajadora, prendas cómodas que permitían a la mujer ejercer su profesión con facilidad; traje sastre de tweet (semejante al traje de chaqueta masculino), tacones medios o zapatos planos, o su famoso bolso 2.55, que podía colgarse por una cadena dejando de lado a los incómodos bolsos de mano. Todo ello para ayudar a la mujer moderna e independiente que empezaba a abrirse paso tímidamente en el mundo laboral.


Popularizó el uso de bisutería. Ninguna mujer dependía de ningún hombre para lucir adornos ya que no eran necesarias las grandes joyas para adornar y complementar.


El tono bronceado lo convirtió en sinónimo de modernidad y glamur; y no de ser pobreza o clase trabajadora.


El negro como color de la elegancia. Por entonces estaba asociado al luto y a las vestimentas de las viudas pero ella lo elevó a la máxima categoría y lo convirtió en el mejor aliado de millones de  mujeres de todo el mundo.


Fue una revolucionaria sexual; tuvo innumerables amantes y nunca se sintió cohibida en expresarlo. Nunca llegó a casarse, pero no creía que nadie pudiera pertenecer a nadie para siempre.


Fue la primera mujer empresaria conocida por el gran público. Fue una pionera en abrir su propio negocio en 1910.


Democratizó la moda; demostró que la elegancia y el estilo no son sinónimo de clase social, utilizando para sus diseños materiales tan ordinarios como las pieles de conejo; dejando de lado las sedas y encajes tan valorados hasta entonces.

A continuación os dejo el enlace al documental "Las Guerras de Chanel" en el que nos relata estas innovadoras acciones que Coco Chanel nos dejó como legado y su biografía. Os recomiendo la visualización, ya que para mí se ha tratado de un muy agradable descubrimiento.





lunes, 1 de junio de 2020

Lo que no sabemos de nosotros mismos


¿Realmente lo sabemos todo de nosotros mismos? Yo no lo tengo tan claro...
Hay cosas que sabemos, cosas que creemos y cosas que aprendemos. También hay cosas que pensamos y otras que damos por sentado.
Nosotros mismos no dependemos sólo de nosotros sino de todo lo que nos rodea e influye: sociedad, educación, cultura, país de nacimiento, ciudad donde vivimos, lengua, religión, familia, amigos, y un sinfín de etcéteras con los que podríamos llenar varias páginas.
Sólo quiero ponerte a prueba; a ver cuán perspicaz llegas a ser.
Yo reconozco que no lo fui...
Mira este vídeo y me entenderás.


Primer contacto

Hola a todos!
Mi nombre es Natalia Vidal y soy novata en este tipo de comunicación y en muchos otros aspectos que iré relatando a lo largo de estas semanas.
Actualmente soy funcionaria interina en la Oficina de Extranjeros Comunitarios de la comisaría de Policía Nacional de la Verneda, en Barcelona.
Mi cometido es reforzar al equipo actual en la tramitación de documentación de extranjeros británicos afectados por el Brexit, y esta posición es la que me ha permitido participar en el curso de Fundamentos sobre la igualdad entre hombres y mujeres del INAP, que es la principal razón por la que abro este blog.
Hasta ahora no lo había hecho, aunque era una cosa por la que tenía cierta curiosidad y que este curso me ha impulsado a comenzar.
Soy madre de dos niñas, Inés y Blanca, de 4 y 2 años de edad respectivamente. Es por ellas por las que estoy aquí, haciendo un giro de 360º en mi vida, después de más de 15 años de profesión como interiorista y de alguna que otra mala experiencia personal en el sector privado.
Durante mi segundo embarazo empezaron a plantearse los primeros problemas de conciliación familiar y tuve la certeza de que se acercaban cambios importantes en mi vida y en mi profesión.
Es por este motivo por el que me interesa principalmente este curso ya que evidencié en mi propia experiencia que, la igualdad, conciliación familiar o la brecha salarial son aspectos de los que queda mucho por avanzar y, por supuesto, mucho que interiorizar en cada uno de nosotros.
Me gustaría que esta experiencia de aprendizaje me inculcara nuevos valores y conceptos, vagamente conocidos pero poco reales o efectivos por el momento; y poder crear esos fundamentos esenciales de igualdad que tan importantes son y que tanto quiero que aprendan mis hijas.
Mi vida gira en torno a ellas y en torno a su completo desarrollo, tanto a nivel personal, físico y mental; para que se conviertan en mujeres plenas y felices en una sociedad que las acoja sin prejuicios y llena de oportunidades...




Agradezco la oportunidad de formar parte de este curso y de esta innovadora forma de impartirlo. Estoy segura de que será muy enriquecedora para todos.
Un saludo
NATALIA VIDAL